Hoy he descubierto, con gran susto, que hace ya nueve años que leí El libro del desasosiego, de Fernando Pessoa. En aquel momento capté su grandeza, pero poco más. Así que lo voy a releer. ¡Ojalá no me decepcione!
Lo que sobre todo hay en mí
es cansancio
y aquel desasosiego que es gemelo del cansancio,
cuando éste no tiene más razón de ser
que la de estar siendo
(…)
Todo me resulta frustrante por anticipado