…Hay un algo enigmático y hermoso en Valerón, algo que tiene que ver con esa apabullante naturalidad que desprende su fútbol (…) Ese regate, ese amago, ese pase fueron trazados así no por una ocurrencia súbita, sino porque no podían ser de otro modo, como si alguien hubiese susurrado al oído de Valerón el secreto de las leyes naturales que gobiernan el fútbol y él se limitase a aplicarlas en cada momento con disciplina y precisión. Fuera de Zidane (…), probablemente no haya ningún otro futbolista en el mundo con su capacidad de convertir el fútbol en algo tan espontáneo, tan poco forzado, tan desprovisto de artificio y retórica.
¿Es o no es literatura? Se trata del extracto de una crónica reciente escrita por Xosé Hermida en la sección de Deportes de El País. Hay sonoridad, musicalidad (pocos apellidos hay en el fútbol actual tan poéticos como el de Zidane), ritmo… y sentimiento, mucho sentimiento. Emociona.