Seguro que pensáis que me gustan películas como Titanic, o El diario de Bridget Jones, o las de Meg Ryan, o Moulin Rouge… Vale, pues sí :o| … Pero hoy, como excepción, he visto una película francesa, muy francesa: Retratos chinos. Hablan francés, hasta Helena Bonham-Carter habla en francés, pero no sé si bien o mal. Rápido, eso sí. La película me ha hecho pensar en serio sobre varias cuestiones. Una es que los guapos franceses son distintos de los guapos españoles. De hecho, supongo que había tres guapos franceses en la película, pero yo me he esforzado y no he detectado la belleza en ningún lado. Eso sí, nada que ver con Mathieu Kassovitz, el guapo de verdad de Amélie, que hasta tiene web oficial y que para mí es lo mejor de Amélie, aparte de los colorines de la ropa de Amélie, que, dicho sea de paso, para un día, vale, pero para todos los días me apuesto lo que sea a que te cansan enseguida. Habrá que probar, ya os cuento.
Luego está el tema de la playa. En las películas francesas se bañan con bañador, y bastante feo, en general. En España hoy en día no te puedes bañar con bañador, sólo con bikini. Si no, no te integras. Pero lo mejor es que casi todos están muy pálidos incluso en bañador y, atentos al dato, muchos de los personajes incluso lucen barriguita en la playa, y con muchos personajes quiero decir que las jóvenes actrices también. No sólo los «hombres maduros y sin embargo atractivos». Tienen cosas buenas ahí al lado. Au revoir!