Este puente pensaba hacer la ruta del castellano por La Rioja, pero finalmente ha sido la del castellano, la del Cid, la del vino… y un tramo del Camino de Santiago.
La ruta del castellano me ha llevado a San Millán de la Cogolla, a los monasterios de Suso (arriba) y Yuso (abajo). En Suso buscaba, aparte de las glosas emilianenses, el rincón donde escribía Gonzalo de Berceo, pero lo que allí me esperaba era la familia del Cid: en la entrada estaban los sepulcros de los Siete Infantes de Lara (yernos del Cid) y de Doña Jimena madre (suegra). También unos esquemáticos grafitis medievales y la pequeña gruta de Santa Oria en lo alto, donde el monasterio se adentra en las rocas. A pesar de ser Patrimonio de la Humanidad, los dos monasterios todavía no están tomados por el turismo, sino todo lo contrario: viven ajenos a él. Son capaces de cerrar dos días consecutivos en pleno puente de mayo.
En Viana me topé con otro sepulcro ilustre: el de César Borgia. Parece que el hijo de Alejandro VI murió allí en 1507, y se le dio sepultura en la iglesia medieval de Santa María, alrededor de la que descansan decenas de peregrinos camino a Santiago.
Sobre la ruta del vino y los códices emilianenses hablaré en otros lugares de la redMolona. Vídeos e imágenes en breve.