El Telegraph se hace eco del regreso de Debra Winger después de diez años alejada de los focos, que no de la interpretación, la escritura y la docencia.
Tras rodar Shadowlands (Sombras de niebla, 1994) y recién cumplidos los 40, la actriz se alejó del cine porque no quería interpretar a mujeres mayores o más jóvenes de lo que era ella entonces. Ahora y con 53 dice que ya es posible.
La película del regreso es Rachel Getting Married, de Jonathan Demme.
Ya no recordaba esta actriz, así que me he ido a Google, he mirado su filmografía y de todas las que hizo y de las que yo vi me quedo con Tierra de penumbras.
Igual voy a ver La boda de Rachel.
Respecto a su conflicto con la edad y los papeles que le ofrecían interpretar me parece muy inteligente su postura.
Hormiga, ¡Felices Fiestas!
🙂