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La gran ola de Kanawaga y Una cuestión personal

La gran ola de Kanagawa, de Hokusai
La gran ola de Kanagawa, de Hokusai

Conocía La gran ola de Kanawaga (1830), pero no sabía que era un símbolo nipón de tal magnitud. En el circuito de suvenirs esta imagen es tan ubicua como las figurillas de la Torre Eiffel en París. Forma parte de la serie 36 vistas del Monte Fuji, fruto de la obsesión de Hokusai por capturar la belleza del pico más alto de Japón.

Dicho esto cierro el capítulo de posts sobre el viaje a Japón con el tercer libro que leí antes de partir y que finalicé en el vuelo Amsterdam-Tokio: Una cuestión personal (1964), de Kenzaburo Oé. Este autor fue Nobel en 1994 y estaba en la lista de lecturas pendientes desde entonces. Por supuesto el que sea Nobel ya no significa tanto en esta carrera por desmitificar todo en la que nos encontramos.

No es precisamente un libro que dé alegrías. Bird, ex alcohólico, da clases en una academia privada de preparación para el ingreso en la universidad. Su sueño es viajar a África y en esos pensamientos se halla cuando le avisan de que su mujer ha dado a luz. Su hijo sufre una hernia cerebral y este golpe de realidad le lleva a poner los pies en la tierra, encomendarse a la esperanza y la perseverancia y cambiar de plan: Siempre soñé con viajar a África y contratar un guía, de modo que solo invertiré la fantasía: yo seré el guía local para quienes visiten Japón.

Al margen de este doloroso argumento autobiográfico -Kenzaburo Oé lo escribió tras nacer su hijo con deficiencia mental-, el libro ofrece muchas notas sobre el carácter japonés:

La paternidad: Kafka le escribió a su padre que lo único que puede hacer un padre por su hijo es acogerlo con satisfacción cuando llega. Usted, en cambio, parece rechazarlo. ¿Puede excusarse el egoísmo que rechaza a otro ser, basándose en un derecho del padre?

El infortunio: Si uno se enfrenta a dos acontecimientos desconocidos al mismo tiempo, uno resultará calamitoso y otro afortunado.

La autocompasión: Cuando alguien es minado por el veneno de la autocompasión, ya no puede tomar decisiones sobre lo que le concierne.

La recompensa: Tienes razón. Es una cuestión personal. Cuando estás solo dentro de una cueva privada, al final llegas a una salida lateral que conduce a una verdad que te concierne a ti y a todo el mundo. Eso recompensa los sufrimientos padecidos.

El suicidio: El suicidio era de lo más común, algo de todos los días […] En el norte de Europa existe un animalillo similar a una rata, el lemming; a veces los lemmings se suicidan en masa. ¿No te parece que pueden existir personas como los lemmings?

El movimiento antinuclear en los sesenta: Mis días de estudiante han pasado. Ya no soy tan sensible a la situación internacional ni a la política. Sin embargo, las armas atómicas siempre me han preocupado. Nuestro grupo de estudio de lenguas eslavas participó en una campaña antinuclear. Con respecto a lo de Jruschov, no sé qué me ha pasado […] Está muy bien que ellos participen en el destino del mundo con sus concentraciones de protesta, pueden hacerlo mientras no les caiga encima un bebé con dos cabezas.

Monte Fuji con el tiempo despejado, de Hokusai
Monte Fuji con el tiempo despejado, de Hokusai

Y alguna nota costumbrista sobre Japón también en el prólogo de Justo Navarro:

Las ambulancias: En Japón los servicios de transporte de enfermos de urgencia están a cargo del cuerpo de bomberos.

El embarazo: El periodo de embarazo se considera como de diez meses.

El curso escolar: Los cursos escolares comienzan en abril, o sea que mayo es todavía la época de presentación entre estudiantes.

Los nisei: Es como denominan a los japoneses nacidos en el extranjero, hijos de padres emigrantes.

Cómo contar los años: Es habitual contabilizar los años según el tiempo de reinado de cada emperador. Por ejemplo, 1987 es el año Showa (era del emperador actual), ya que este reinado comenzó en 1925.

Un comentario

  1. rosa zafra rosa zafra

    Es muy duro tener un hijo con alguna deficiencia, te quedas como ausente, sin poder pensar y cuando reaccionas, solo te dices¡que va a ser de el!.
    La vida nos reserva muchas pruebas, es como un juego, solo que aqui, el fin lo conocemos desde el principio.
    No queda otra que ser feliz los momentos que nos dejan.
    La belleza de esas pinturas siempre me
    gustaron.

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